domingo, 3 de octubre de 2010

Un paseo por la dehesa

Colmenar del Arroyo, 26 de Septiembre de 2010




Sol, claridad y algo de fresco. Momento ideal para acudir una tarde de Domingo a dar un paseo por una dehesa. Una de las mejores dehesas de encinas que he visto hasta ahora en la Comunidad de Madrid es la Dehesa Boyal de Navalmoral, situada en el municipio de Colmenar del Arroyo, en el Suroeste de la región. Esta extensa dehesa está conformada por unas cuantas fincas,unas privadas y algunas pertenecientes a la Comunidad de Madrid. Por ellas discurre un sendero marcado circular con algunos paneles explicativos a lo largo del recorrido.


La dehesa es un monte transformado por el ser humano con el fin de conseguir un aprovechamiento ganadero. Esta transformación consiste en una clara del monte original, es decir, eliminar parte del arbolado y de los arbustos para crear espacios abiertos que favorecen el crecimiento de plantas palatables para el ganado : principalmente gramíneas y leguminosas herbáceas (lo que llamamos comúnmente la hierba). Con ello se alimenta a las vacas,cabras,ovejas, etc, de las que se aprovechan ciertos productos : carne, leche y derivados, lana, piel, etc. A pesar de la alteración del bosque original, la dehesa ha demostrado ser un buen ejemplo de relación sostenible del ser humano con la naturaleza. Este uso moderado ha favorecido a muchas especies emblemáticas del monte mediterráneo, como el conejo de monte, y con él al lince y al águila imperial , por ejemplo. Además, las personas sacan provecho económico. Los abrevaderos para el ganado (como el que se ve en la primera foto) también dan de beber a muchas aves.


El atardecer a principios de otoño en un encinar adehesado es una experiencia hermosa ya que el paisaje se carga de tonos amarillentos procedentes de los herbazales agostados en contraste con el verde intenso del follaje del encinar, unido al rojo crepuscular.










En esta zona es habitual encontrarse con ganado bovino y caprino pastando. En esta época, las vacas recurren a las coriáceas encinas para satisfacer el apetito, ya que en el suelo queda poca cosa. 



Como diría Nuevo Mester de Juglaría : "Bajó el cabrín cabrate a comer la hierba hierba frescate"

A cuatro días del comienzo del mes de Octubre, la mayoría de las plantas han completado su ciclo vegetativo y están agostadas. Entre ellas, destacan elegantes los involucros de un cardo muy frecuente en los pastos nitrificados, la Centaurea ornata.


Pero hay algunas especies vegetales cuya floración comienza ahora. Una de las más famosas es la Merendera montana, conocida popularmente como la Quitameriendas. Los prados en algunas zonas se cubren de esta planta bulbosa, que tiene la particularidad de florecer antes de echar las hojas.



Hay que tener cuidado de no confundir esta planta con una muy parecida que es venenosa, se trata del Cólquico (Colchicum autumnale). La diferencia con la Quitameriendas es que la flor del Cólquico tiene un tallito que la levanta varios centímetros del suelo. 


En la parte superior izquierda aparece la flor del Cólquico, donde se ve claramente el tallito de la flor. Abajo a la derecha la flor de la Quitameriendas, que está sentada (sin tallo).

A pesar de ser tóxica, Colchicum autumnale posee los usos más interesantes ya que la colciquina, uno de los alcaloides que produce esta planta se está usando en genética experimental con el fin de obtener nuevas variedades y formas de cultivo. Los principios activos del Cólquico también se usan en farmacia como relajante muscular.

2 comentarios:

  1. Qué bien Eritaco, a ver si con tu clara explicación ya cosigo distinguir el Quitameriendas del Cólquico.

    Una buena dehesa que visitar en otoño... ¡y en primavera!

    Se aprende mucho con tu blog.

    Gracias.

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  2. Muchas gracias. Me alegro. La naturaleza siempre nos enseña cosas.

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